El Origen del Golden Retriever
En general es bastante difícil intentar analizar los orígenes reales de una raza sea la que fuere. En efecto, la mayoría de los perros tenían básicamente una función únicamente utilitaria y no se indicaban descripciones de orden científico; la cinofilia tal como la conocemos hoy en día es muy reciente. Además, muchas razas han suscitado un número incalculable de leyendas heroicas que son muy difíciles de comprobar. Sucede especialmente con las animales que han servido en las invasiones, las << grandes partidas de caza>> y otras actividades particularmente violentas.
Por suerte, el Golden Retriever ha escapado a todas esas historias enrevesadas, y como su historia es muy reciente, a semejanza de muchos perros de caza o pastores, se poseen suficientes y precisos documentos para esbozar el reconocimiento de su existencia. Esos documentos, de los que hablaremos mas adelante, no pueden criticarse en absoluto desde el punto de vista de su veracidad en conjunto, y todos los autores están de acuerdo en la descripción de la historia de esta raza tan especial.
Aunque el Retriever fue creado en el siglo XIX en Gran Bretaña, se conoce mal el proceso de selección. En ingles el termino Retriever significa <<Cobrador>>, lo que indica que se trata de perros cuyo papel es buscar la presa abatida por los cazadores y luego devolverla. El adjetivo Golden (<<dorado>>) se refiere al color del manto de esta raza. Parece ser que el Labrador, primo del Golden Retriever, apareció en la década de 1820, y que los demás miembros de la familia saldrían de cruces entre el Labrador, el Terranova, el Water Spaniel y, según algunos, otras razas entre las que se encuentra el Setter.
Si Sir Dudley Marjoribanks existió en realidad y fue el padre verdaderamente del Golden Retriever, el resto de la historia es completamente falso, En realidad, los principios de la raza parece que se remontan a la segunda mitad del siglo XIX, efectivamente en Gran bretaña en la propiedad de Sir Dudley Marjoribanks, quien adquirió en 1854 el coto de caza Guisachan House situado en Escocia, concretamente en Iverness. Recibió el titulo de Barón de Tweedmouth en 1881(nombre con el que es más conocido en la literatura actual) y se convirtió en el primero en el linaje que ostenta ese apellido.
Nous o el principio de una larga descendencia
Lord Tweedmouth se apasiono mucho por la cría en todas sus formas; fue así como trabajo en la selección bovinos, caballos, ponis, y claro esta, perros. En este ultimo campo el entusiasmo que dedico al deporte en general y a la caza en particular lo oriento hacia las razas propias de esta disciplina: perros de parada como el Pointer (to point significa <<indicar>>, ya que estos animales se detienen para mostrar al dueño donde se esconde la caza), Terrier, y Scottish Deerhound o Lebreles de Escocia, capaces de hacer salir del bosque, acorralar, atrapar y matar corzos y gamos. En 1865 Lord Tweedmouth compro un perro macho de color amarillo (el único de la camada) engendrado por Retriever de pelo liso y negro (seguramente Flat o Wawy Coated Retrievers) a un zapatero remendón de Brighton que lo había obtenido de un guardia de caza que a su vez lo había adquirido del Conde de Chichester. Ese perro se llamaba Nous (sabiduria en gaélico), y se convertiría en cimiento de la raza. Es muy probable que Lord Tweedmouth encontrara caracteres morfológicos particularmente interesantes en ese perro y que no solo el color hubiera guiado su elección. En efecto, era bastante frecuente que en una camada de Retriever, algunos cachorros se apartaran del color negro dominante para orientarse hacia matices más claros, incluso hacia el amarillo.
Es preciso señalar además que este fenómeno sucede también de vez en cuando, aunque los criterios morfológicos de los Retriever negros como algunos Labradores u otros Flat Coated Retriever estén especialmente bien establecidos.
La descendencia de Nous
Lord Tweedmouth cruzo a Nous con una hembra llamada Belle, que había recibido como regalo de David Robertson, un parlamentario ingles de gran reputación. Esa perra era, según dicen, de raza Tweed-Water Spaniel. No existe a priori ninguna prueba tangible en cuanto a la existencia real de esta raza, pero se considera que era seguramente una raza local hoy en día desaparecida. Tal vez fuera una especie de Podenco gigante con un manto ondulado y de color negro o hígado, en todo caso muy oscuro, que habría vivido en las inmediaciones del río Tweed y que ayudaba a los pescadores escoseces en su trabajo. Sin embargo, algunos textos describen a Belle como de pequeño tamaño y de color fuego, lo cual no deja de ser chocante.
El resultado de esta unión fue una camada que comprendía cuatro cachorros de color amarillo: tres hembras y un macho. Esos cachorros nacidos en 1868 fueron bautizados con los nombres de Cowslip, Primrose, Crocus y Ada. Primrose y Cowslip se quedaron en Guisachan; Crocus fue regalado a Lord Tweedmouth II, y Ada fue regalada a un sobrino (el quinto Conde de Ilchester). El único documento grafico que atestigua la existencia de esta camada es un retrato de Ada en compañía de su dueño, el Conde de Ilchester, y según personas que han tenido la suerte de contemplar esta obra, es sorprendente y admirable el parecido existente entre Ada y el tipo actual de Golden Retriever, casi ciento cincuenta años mas tarde.
Mas adelante, y a partir de la primera camada que había obtenido, Lord Tweedmouth constituyo progresiva y meticulosamente su selección para logra un perro de múltiples cualidades. Ese trabajo continuo hasta 1890. Lord Tweedmouth murió en 1894. Se sabe que el creador de la raza utilizo muchas reproducciones consanguíneas (inbreeding), pero también aporto sangre (outcross) de perros que aportarían o fijarían caracteres precisos de la raza. El objetivo real y confeso era, obviamente, lograr un perro perfecto para la caza. Un perro con el olfato de los Setter, la cualidad de pelo particularmente compatible con el agua del Wawy Coated Retriever, las cualidades de caza así como la seguridad del Spaniel y el color dorado. Se supone que en esa época ese color se consideraba como algo útil, ya que constituía una especie de camuflaje en los pantanos. Nuestro amigo debía de tener además una resistencia a toda prueba y no refunfuñar al saltar al agua incluso si se helaban las piedras.
Como decíamos antes, los orígenes de la existencia del Golden Retriever se conocen de forma precisa y se basan en documentos irreprochables.
Elma Stonex realizo durante años investigaciones para demostrar que la historia de los perros de circo era solo una invención romántica y en 1952 el sexto Conde de Chichester (sobrino segundo de Lord Tweedmouth) recurrió al periódico Country Life para publicar un articulo sobre los orígenes del Golden Retriever. Hablaba de sus recuerdos de infancia, pero sobre todo de un libro de orígenes personales que había llevado Lord Tweedmouth de 1864 a 1890 (año de nacimiento de los dos últimos cachorros amarillos registrados). Ese hombre tuvo el ingenio y la lucidez de anotar todos los cruces que habían realizado sus perros. Este libro llamado Libro de Chenilse halla en la actualidad en posesión del Kennel Club Ingles.
Aparición del Standard
En 1913 Mr. CharlesWorth fundo el Golden Retriever Club, y redacto el primer Standard. Durante el mismo año, el Kennel Club Ingles, que consideraba a esos perros como una variedad amarilla del Flat Coated Retriever, acordó un estatuto mediante el cual aceptaba la denominación de Golden o Yellow Retriever. Pero fue en 1930 cuando el standard se hizo oficial. A pesar de todo, los cruces interraciales siguieron autorizados por el Kennel Club hasta 1971, el último registro data de octubre de 1969: fue el de un Labrador con un Golden Retriever.
La creación, y luego la potenciación del raza fue fulgurante, ya que se trata ahora de una de las razas favoritas en todo el mundo y en particular para los anglosajones, mientras que era desconocida hace menos de un siglo. El Golden Retriever puede servir, es cierto, en muchas situaciones que no sean la caza (ayuda a discapacitados, búsqueda en escombros o aludes, seguimiento de pistas, agility, etc.), pero sigue siendo, sobre todo y ante todo, uno de los preferidos como perro de compañía, en particular en Gran Bretaña y Estados Unidos desde 1950, pero también en Bélgica y en los Países bajos desde 1980. En nuestro país su imagen es conocida por todos gracias a sus numerosísimas apariciones públicas (películas, anuncios de alimentos caninos u otros productos) y se encuentran cada vez más en nuestros hogares. Muchos personajes públicos y celebres parecen en todo el mundo con un Golden Retriever, como los del Rey de España, el rey de Bélgica, la Reina de Inglaterra o el príncipe Juan de Luxemburgo.
Una leyenda extravagante
A pesar de todo, la leyenda del origen del Golden Retriever es lo suficientemente divertida como para haber mantenido su vigencia hasta hoy. A menudo se cuenta que Sir Dudley Marjoribanks observo a un grupo de ocho perros de un circo procedente de Rusia que realizaba una presentación en Brighton. Esos perros, nacidos de un pastor del Cáucaso, impresionaron tanto a nuestro protagonista que los compro a precio de oro. Esta historia fue, además, relatada en la revista Country Life en un articulo redactado por Arthur Croxton-Smith y titulado <<The Russian or Yellow Retriever>> en 1914. Cuenta la historia que Sir Dudley Marjoribanks se llevo luego a esos animales a su propiedad en el campo y empezó la cría.
Esta teoría de los orígenes del Golden Retriever fue apoyada por el Coronel Per Trench y Mrs. Charlsworth (conocidos criadores de su época) e incluso por miembros de la familia de Sir Dudley Marjoribanks, en particular por Lewis Harcourt, quien era miembro de la Camara de los Comunes y que adquirió mas tarde Guisachan House. Hartcourt, además de pertenecer a la familia de Sir Dudley Marjoribanks, fue la primera persona que presento un Golden Retriever, con esta denominación, en una exposicion oficial.
La leyenda pervive aun hoy y goza de una gran aceptación. De hecho, hasta hace muy pocos años se consideraba cierta, tal como puede comprobarse hojeando el catalogo de la exposición de Crufts (la mas importante del Reino Unido) celebrada en 1960.